¿Piensas que te han echado mal de ojo? Si estás pasando por una etapa de tu vida en la que te sientes decaído o decaída, que parece que todo te sale mal, te encuentras pesado/a, incluso hay momentos en los que te falta el aire, es posible que si, que te hayan echado un mal de ojo y que vayas a tener muy mala suerte hasta que hagas algo para remediarlo.
Por fortuna, nosotros tenemos la solución perfecta: se trata de este ritual para quitar mal de ojo / mala suerte que podemos hacer con ingredientes sencillos, nada complicados de conseguir.
En las siguientes líneas te detallamos como debes hacerlo:
Ingredientes que te hacen falta
·3 cucharadas de sal: Debe ser sal gorda marina, no te vale la sal fina.
·Incienso.
·Vela: Debe ser de color blanca, ya que este color se relacionado con la pureza y es precisamente lo que estamos buscando en este ritual.
·Agua bendita: Cómo seguro que ya sabes, el agua bendita la puedes conseguir en sitios especializados, aunque también podrías consagrarla por ti misma.
¿Cómo hacer el ritual para quitar el mal de ojo o mala suerte?
Se recomienda hacer el ritual para quitar mal de ojo/mala suerte cuando caiga la tarde:
- Llena la bañera con agua tibia y agrega las 3 cucharadas de sal.
- Enciende la vela blanca y pídele a Dios que sea tu guía y que ilumine tu vida.
- Enciende el incienso para purificar el entorno.
- Una vez tengas esta atmósfera preparada, sumérgete en la bañera y permanece en ella durante unos 10 minutos.
Si no tienes bañera, también puedes disolver la sal en una jarra de agua que esté a temperatura templada. Échala después de ducharte y asegúrate de que pase por la mayor parte de tu cuerpo. Sécate con una toalla que esté limpia, de arriba hacia abajo, como si estuvieses arrastrando las impurezas.
Para finalizar, tanto como si has hecho el ritual en la bañera, como si te has decantado por la jarra, coge un poco de agua que hay quedado y colócala en un frasco. Este frasco lo dejarás abierto durante una noche en tu habitación.
Te darás cuenta que, conforme pasen unos días, la buena suerte volverá a entrar en tu vida, y la mala suerte del mal de ojo quedará relegada a un segundo plano, hasta que finalmente sea eliminada. Se acabará la mala racha y empezará un nuevo camino.